Aprisionada entre dos cantos

En la grieta de una pared de la esquina
Aprisionada entre dos cantos
Un alma tímida encontré
Latiendo en un corazón desbocado

Tenía las experiencias furtivas
De amantes descarados y callejeros
De perros desesperanzados oliendo amor
En húmedos botes de basura

Tenía un voluptuoso cuerpo maltratado
Corroído con agujeros de guitarras
El brillo noble de estrella neón lila
Escondido tras una cara pintarrajeada

Aquella noche de juerga descubrí
Un destino atrapado entre dos cantos
Entre una diosa blanca que da sustento
Y un mundo tristemente alegre de espanto  

Aquella noche oscura vislumbré
Pintada en una grieta de la pared
Aquella ilusión perdida de mi juventud
A esa mujer diez años mayor,  a la que quise tanto
( Fransel)